Blog

Blog


Claves de la climatización en la fase de destete

Claves de la climatización en la fase de destete

30 de abril de 25 - Noticias

Marcel Weiss Hoffmann. Área comercial Munters

La fase de destete, que representa la transición de la lactancia a la alimentación independiente, es un período crítico en la producción porcina. Una adecuada climatización en las instalaciones de destete es esencial para garantizar la salud, el crecimiento y el bienestar de los lechones, preparar al animal para el inicio al pienso y permitir que alcance su potencial a lo largo del ciclo de producción. Los diferentes climas y condiciones ambientales en todo el mundo presentan desafíos únicos para mantener un entorno óptimo para los lechones. La gestión eficaz de la temperatura, la humedad y los sistemas de ventilación tiene un impacto significativo en el éxito de una granja porcina durante esta fase. Este artículo explora aspectos del control climático en las instalaciones de destete, y destaca los beneficios económicos y el retorno de la inversión (ROI) asociados con estos sistemas. Además, enfatizamos la importancia de la planificación, la selección del equipo apropiado y el papel de los profesionales capacitados en el diseño y mantenimiento de sistemas climáticos eficientes.

La importancia de la climatización en destete

El control del clima en las instalaciones de destete es un aspecto fundamental en la producción porcina. El entorno de estas instalaciones influye directamente en la salud, la comodidad y el potencial de rendimiento de los lechones. Una gestión climática inadecuada puede provocar estrés, enfermedades y malas tasas de crecimiento, lo que afecta negativamente a la rentabilidad de la granja. Los lechones en fase de destete son especialmente sensibles a su entorno. Sus sistemas termorreguladores aún se están desarrollando, y requieren condiciones cuidadosamente controladas para prosperar. Mantener el equilibrio adecuado de temperatura, humedad y calidad del aire es esencial para su salud y crecimiento. Si no se proporciona un entorno óptimo, se puede disminuir la ingesta de alimento, reducir las tasas de crecimiento, aumentar la susceptibilidad a las enfermedades e incrementar las tasas de mortalidad. 

Regulación de la temperatura

El control de la temperatura es un factor clave en la gestión del clima en un destete. Los lechones tienen una zona termoneutral específica, normalmente entre 28 y 32°C durante la fase inicial, que disminuye gradualmente a medida que crecen. Mantener este rango es fundamental para garantizar un crecimiento y desarrollo adecuados. 

  • Estrés por frío: Si la temperatura cae por debajo de la zona termoneutral, los lechones gastarán energía para mantener su temperatura corporal, reduciendo la energía disponible para el crecimiento. El estrés por frío puede debilitar el sistema inmunológico, aumentar la susceptibilidad a las enfermedades y provocar un aumento de peso desigual entre el grupo. Los lechones son especialmente sensibles al estrés por frío.  
  • Estrés por calor: Las altas temperaturas pueden provocar estrés por calor, reduciendo la ingesta de alimento y comprometiendo el rendimiento del crecimiento. El estrés por calor también puede aumentar la frecuencia respiratoria, lo que hace que los lechones sean más vulnerables a las enfermedades respiratorias. 

Los sistemas eficientes de calefacción y refrigeración, como los calentadores radiantes y los coolings de enfriamiento evaporativo, son esenciales para mantener temperaturas óptimas y minimizar el estrés térmico. 

Ventilación y calidad del aire 

La ventilación adecuada es otro aspecto crítico del control del clima en el destete. Los sistemas de ventilación se encargan de eliminar el exceso de calor, humedad y gases nocivos, como el amoníaco y el dióxido de carbono, al tiempo que garantizan un suministro constante de aire fresco. 

Una ventilación eficaz evita la acumulación de gases nocivos y minimiza el riesgo de problemas respiratorios. La ubicación estratégica de las entradas de aire y los ventiladores de extracción es crucial para garantizar un flujo de aire uniforme y evitar puntos calientes o fríos dentro de la nave. Un sistema de ventilación bien diseñado mantiene un equilibrio ideal entre el suministro de aire fresco y las condiciones ambientales interiores, lo que garantiza que los lechones permanezcan cómodos y sanos. 

Beneficios económicos del control climático

Invertir en sistemas de control climático en las instalaciones de cría no solo es vital para el bienestar animal, sino que también tiene importantes ventajas económicas. Los beneficios incluyen un mejor rendimiento del crecimiento, menores tasas de mortalidad y una mayor eficiencia operativa. 

  • Rendimiento de crecimiento mejorado: El control climático adecuado garantiza que los lechones permanezcan en su zona termoneutral, lo que les permite convertir el alimento en peso corporal de manera más eficiente. La mejora de las tasas de crecimiento da lugar a cerdos más pesados y sanos al final de la fase de cría, lo que reduce los días de comercialización y aumenta la rentabilidad. Los beneficios se trasladan a la siguiente fase de producción, beneficiando a toda la cadena productiva.
  • Reducción de las tasas de mortalidad: La gestión eficaz del clima reduce el estrés y los riesgos de enfermedad, lo que se traduce en mayores tasas de supervivencia. Las tasas de mortalidad más bajas significan que más lechones pasan a la etapa de engorde. 
  • Menores costos veterinarios: Un entorno bien controlado minimiza la aparición de enfermedades respiratorias y otras enfermedades relacionadas con el clima, lo que reduce la necesidad de tratamientos y los gastos veterinarios. 
  • Eficiencia energética: Los sistemas de climatización modernos están diseñados para optimizar el uso de la energía, incorporando sensores y automatismos para ajustar la calefacción, la refrigeración y la ventilación según las necesidades del entorno. Esto puede dar como resultado un importante ahorro de energía a lo largo del tiempo, la reducción del impacto en el medio ambiente y la mejora del retorno de la inversión. 

Retorno de la inversión (ROI)

Si bien el coste inicial de los sistemas de control climático puede ser sustancial, si se realiza correctamente los beneficios económicos a largo plazo superan la inversión inicial. La mejora del rendimiento de los lechones, la reducción de los índices de conversión alimenticia, la reducción de los costes veterinarios y el ahorro de energía contribuyen a un retorno de la inversión positivo. 

Por ejemplo, mantener un clima ideal en la fase de destete mejora la eficiencia de la alimentación, lo que reduce los costes de alimentación e incrementa el aumento de peso. La reducción de la mortalidad y la mejora de los resultados sanitarios impulsan aún más la rentabilidad al aumentar el número de cerdos sanos que entran en la fase de engorde. Con el tiempo, estos factores hacen que la inversión en sistemas de control climático sea una decisión financieramente sólida. 

Planificación y selección de equipos

Lograr un control climático efectivo en las instalaciones de destete requiere una planificación detallada y el uso de equipos adecuados. Factores como el diseño de los corrales, los materiales de construcción, el clima local y las prácticas de manejo desempeña un papel importante en la determinación de la eficiencia del sistema.  No es posible utilizar una única solución para todos los proyectos.

La consulta con profesionales capacitados garantiza que el sistema de control de clima se adapte a las necesidades específicas de cada instalación. Los profesionales pueden recomendar el tipo y la ubicación correctos de los sistemas de ventilación, los equipos de calefacción y refrigeración, y los sensores, maximizando la eficacia del sistema. Además, la selección de equipos duraderos y energéticamente eficientes contribuye al ahorro de costes a largo plazo y a la eficiencia operativa. 

Comparte en redes